En 1993 Lavazza decide estrenar la época de los calendarios con un planteamiento creativo específico. La intención es hacer del calendario un instrumento para transmitir una imagen renovada de la empresa: prestigiosa, agresiva, moderna, dirigida a los jóvenes, a lo nuevo y al futuro. El calendario representa un regalo con un valor artístico especial.
Durante dos años seguidos, 1993 y 1994, Lavazza elige al maestro Helmut Newton para bautizar el calendario. El suyo es un estilo inconfundible y a menudo provocador, perfecto para despertar la pasión por el café. Newton realiza imágenes de gran impacto en París y Montecarlo. El guiño y el voyeurismo sensual a los que recurre el fotógrafo para contar sus “ historias” sugieren pasión, erotismo y vitalidad.
Fotografo
Helmut Newton
Modelle
Simonetta Gianfelici
Barbara Borghesi
Escenarios
Paris
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